13/07/2025
La caída de las tasas de interés reduce los rendimientos de las billeteras digitales y fondos comunes de inversión

Fuente: telam
La eliminación de las Letras de Financiamiento repercute en los instrumentos de liquidez inmediata y modifica la renta esperada por millones de ahorristas, mientras el sistema financiero y la plaza cambiaria buscan un nuevo equilibrio
>El retiro de las LEFI, que eran el principal instrumento de absorción de pesos por parte del Banco Central, provocó Las LEFI -Letras Fiscales de Liquidez- fueron instrumentos emitidos por el Tesoro nacional con el objetivo de absorber pesos a cortísimo plazo. Eran colocadas exclusivamente en bancos y ofrecían rendimientos diarios con riesgo casi nulo, por lo que se habían convertido en el principal destino de los excedentes de liquidez del sistema. A comienzos de julio, las entidades financieras acumulaban unos $15,8 billones en estos instrumentos, según datos oficiales.
La decisión de eliminar las LEFI, implementada desde el jueves 10 de julio, liberó de manera inmediata una masa de pesos que no pudo ser absorbida en su totalidad en la última licitación del Tesoro. Como resultado, los bancos pasaron de registrar un déficit de encajes cercano al billón de pesos a un superávit récord de $7 billones, lo que provocó una saturación de liquidez en los instrumentos de muy corto plazo, desplomando la tasa de caución a un día desde el 20,6% nominal anual al 12%, por debajo incluso del mínimo del año.Uno de los primeros impactos se observa en los fondos comunes de inversión de liquidez inmediata (T+0), que son utilizados por millones de ahorristas a través de billeteras digitales como Mercado Pago, Ualá, Prex, Personal Pay y otras. Estos fondos, que invierten principalmente en cauciones, ven disminuido su rendimiento ante la caída abrupta de la tasa de referencia. Según advirtió Martín Przybylski, analista de One618, “los T+0 ya deberían empezar a sufrir: si la caución se acomoda en torno al 20% o 21%, los fondos pasarán a rendir eso en vez del 26% o 27% como venían”.La situación es particularmente sensible porque los money markets no solo pagan menos, sino que podrían enfrentar nuevas limitaciones. “Aún no modificaron los encajes para los money market, si llegan a hacerlo, van a rendir menos todavía”, explicó Przybylski en diálogo con Infobae, y agregó que en ese contexto “deberíamos empezar a ver algo de traspaso hacia los T+1, fondos de Lecaps, etc.”. Es decir, hacia instrumentos con menor liquidez pero mayor rendimiento.Aunque el impacto de la caída de tasas todavía no se reflejó de forma plena, los rendimientos de las billeteras digitales ya mostraban diferencias considerables hasta el viernes 11 de julio. Según datos relevados por el sector privado, Cocos lideraba el ranking con una TNA del 33,56%, seguida por Ualá con 30%, y Naranja X con 27%, aunque con topes de saldo a remunerar. Más abajo se ubicaban Personal Pay (25,50%), Prex (25,48%) y Mercado Pago (23,91%), mientras que otras plataformas como Astropay, Lemon Cash o LetsBit ya se encontraban por debajo del 23 por ciento.La perspectiva para estos rendimientos es marcadamente bajista, coinciden analistas del mercado. Con una caución cayendo a niveles del 12% nominal anual, y sin una nueva oferta de instrumentos de absorción inmediata por parte del Banco Central o el Tesoro, los fondos Money Market en los que invierten estas billeteras perderán rentabilidad progresivamente.Según operadores, el BCRA intervino discretamente en el mercado de futuros para contener presiones en la curva. Las operaciones en la posición julio mostraron movimientos coincidentes con una presencia oficial destinada a frenar la escalada de cobertura en un contexto donde la caída de tasas desincentiva el posicionamiento en pesos. La tasa implícita operó elevada durante buena parte de la rueda, lo que, combinado con un cierre calmo en el segmento spot, fue interpretado como resultado de intervención activa.
El economista Belisario Álvarez de Toledo, director de True Grit, explicó a Infobae que una parte sustancial de los pesos liberados por la eliminación de las LEFI fue absorbida en forma de encajes bancarios: “¿Fueron a encajes porque no se pueden ir a otro lado los pesos? Obviamente. El único que puede absorber esa cantidad de pesos es el Banco Central, y la única forma de colocarlo es en encajes al 0%. Los bancos venían sobreencajando, y entonces cuando se cancelan las LEFI, esos mismos pesos fueron a encajes”.Además, Álvarez de Toledo advirtió que el nivel de tasas actuales puede afectar los incentivos del mercado a liquidar divisas. “Los pesos sobran y empieza a haber incentivos a no liquidar dólares, a no vender. Y la demanda está. Entonces puede empezar a subir [el tipo de cambio], más que nada porque no haya incentivo de tasa para quedarse en pesos”, afirmó.Mientras la tasa de caución a un día se desplomaba, algunos segmentos del mercado en pesos comenzaron a absorber parte del excedente de liquidez.
Según un informe de la sociedad de bolsa PPI, los instrumentos más beneficiados en la semana fueron las Lecap, que llegaron a subir hasta un 1,4%, y los Boncap, que avanzaron hasta 1,3%. Estos títulos, al ofrecer rendimientos a tasa fija nominal, captaron flujos que anteriormente se destinaban a operaciones a un día, pero que ahora buscan alternativas con algo más de duración y mejor tasa efectiva.Por su parte, la curva CER, que refleja expectativas de inflación, se ajustó de forma más moderada. En la parte más corta se mantuvo estable, mientras que en los tramos medios hubo cierta recomposición del apetito, con inversores dispuestos a migrar a bonos como el TZXD5, que cotiza a una tasa real estimada del 11,5%. La relación entre tasa fija nominal y tasa real indexada abrió la puerta a cambios tácticos incluso para perfiles conservadores, según advierten desde PPI.
Además, advirtieron que el uso de instrumentos alternativos como repos o calls está distorsionado por la carga de Ingresos Brutos y ciertas exigencias regulatorias, lo que impide una intermediación eficiente. La estructura tributaria y regulatoria vigente complica la canalización de los flujos, y limita las opciones reales del sistema para digerir el shock de liquidez.
A pesar de ese reacomodamiento, el mercado aún no logró absorber completamente la liquidez liberada. Con una nueva licitación del Tesoro recién prevista para el 31 de julio, y sin emisiones relevantes del Banco Central en el horizonte inmediato, el exceso de pesos sigue presionando sobre las tasas, que podrían mantenerse bajas por tiempo prolongado.Fuente: telam